Guadalupe Guerra.
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Opinión/ Pablo Casal Polo
Hace ya mucho tiempo que Winston Churchill, Jean Monet, Schuman, Adenauer y otros muchos empezaban a plantar una semilla que en aquel momento se presentaba difusa, no convencía a muchos y otros tantos, la miraban con incertidumbre.
El Benelux, la CECA, la CEE, las comunidades europeas, primero en letra pequeña, para después escribir su f futuro con una tinta fuerte y con unos caracteres del tamaño de sus ilusiones y de su futuro… LA UNIÓN EUROPEA. Hemos conocido numerosos logros, con esa palabra tan bonita llamada integración, para ponernos de acuerdo en ese Acervo comunitario, en esos Acuerdos y Tratados que, a veces, tanto ha costado sacar adelante.
Muchos ex dirigentes se echan las manos a la cabeza observando el presente, pero lo cierto es que se presenta duro el futuro, una mirada adelante que se nos dibuja incierta. Con frecuencia los integrantes de esta gran familia nos llenamos de ira la boca, para criticar la presión de los mercados, los duros recortes exigidos desde fuera y la calificación de los profesores más exigentes que hayamos conocido, las Agencias de Calificación.
¿Podrá Grecia lograr la condonación de la deuda? ¿Sabrá Bruselas sacar adelante a los 28 (Recordemos a Croacia)? ¿Seguiremos siendo europeístas o nos pasaremos al bando euroescéptico? ¿Podemos con Standard and Poor’s? No queremos agobiaros con tantas preguntas, simplemente les proponemos una, suponemos, la más preocupante en el marco comunitario.
Desde dentro no vemos por qué tenemos que perder confianza. Muchos de los países afectados poseen deuda, pero lograrán liquidez y nunca habíamos visto una reunión de altos representantes que reflejara tanta unidad, aunque siempre puede haber una oveja negra, claro está. Angela Merkel y Nicolás Sarkozy al frente de un barco en el que todos intentan poner la mejor de las sonrisas a bordo.
Intentaremos no defraudar una y mil veces, perdónenme este amor a la UE, de escuela, me imagino, porque de lo que me he rodeado, siempre me ha demostrado que ha sido duro llegar, pero que siempre hemos sabido esquivar las piedras del camino, con esas estrategias, destrezas y atributos de las que hablaba Jennings para hacer frente al laberinto, con inteligencia. Hemos escuchado antes que hablar (Salvo excepciones), hemos preguntado, hemos sabido tener conciencia de los valores, de los oponentes, hemos compartido y hemos repartido (Siempre en señal de ayuda).
Gracias a los que compartan mi idea y perdonen las molestias aquellos que caminan en el sentido contrario, porque en algún momento nos habremos cruzado y ahí, en ese punto del camino, estábamos a la misma altura, en el mismo sitio, a la misma hora y sólo, únicamente, había una diferencia. Ambos mirábamos al frente, cada uno a su lugar.
Por Isabel López Paredes
Comienzan las noches de café, de nervios y estrés, sin más compañía que la de nuestro gran amigo el flexo… él es único que pone un poco, o mucha, de luz en estas interminables veladas. Tampoco podemos olvidarnos de los rotuladores- subrayadotes-multicolores encargados de reforzar esas líneas que tantas y tantas veces volveremos a revisar. No puedo seguir con esta enumeración sin antes nombrar a los tan queridos post-it, amarillos, rosas, azules o naranjas, redondos, cuadrados y hasta con forma de pie que hacen de nuestros tacos de folios un mundo de fácil acceso a los contenidos importantes, sobre todo para aquellos que guardamos todo de manera fotográfica.
Cabe decir que todas las herramientas o utensilios citadas son los “básicos” para pasar una buena jornada de exámenes, (o al menos los que la mayoría de estudiantes y “estudiantas” utilizan) pero que no son las únicas, ya que para muchos esta época se convierte en algo que los saca fuera de órbita y los transporta a un mundo lleno de manías y obsesiones que implican unos ciertos rituales de concentración y asimilación de las materias que me abstengo a enumerar para no herir vuestra sensibilidad.
En la sala, en la habitación, en la biblioteca, en el parque, en el metro, en el tren, el coche o el avión, da igual el sitio donde se realice la acción de estudiar. Entonces… ¿lo importante es participar? -como nos decía de pequeños si perdíamos en algún juego- Resulta que no, aquí no basta solo con participar, aquí el que juega quiere ganar, ya sea el primer, segundo o tercer puesto, eso sí, pasando los números rojos situados debajo del 5. Lo bueno de este juego es que todos saben que pueden acceder al puesto privilegiado, todos pueden ser ganadores o aptos, puesto reservado – no para los que han colocado más post-it y han utilizado más colores de rotulador- para los que se han esforzado más y para los que le han echado más ganas. También están los que juegan con ganas de ganar, pero se quedan a medio metro o punto de la meta. Y finalmente, los que arriesgan un todo o nada.
Luego están esos complementos circunstanciales de modo; de pie, tumbado, sentado con las piernas cruzadas, dando paseos, escuchando música, en voz alta o los que simplemente estudian sin más, los que hincan codos al pupitre y no los levantan en muchas horas.
En definitiva, la chicha por la que se arma todo este lío y todo este despliegue de instrumentos está bastante clara. Somos estudiantes, por lo que tenemos que comportarnos como tales. Ahora es tiempo de invernar en casa, de cobijar los apuntes y recoger un poco las ganas de salir y pasarlo bien. Porque… ¿quién dijo que la época de exámenes era mala? ¿Quién dijo que sin trabajar se vive mejor? ¿Quién dijo miedo? El miedo no existe, solo los débiles lo sienten y nosotros, estudiantes, no somos precisamente esa clase de endebles. ¿Acaso no hemos superados años y años, meses y meses, días y días de convivencia con exámenes? ¡Eh aquí la cuestión!
¡Buen comienzo de EXÁMENES!
¡SUERTE A TODOS Y A TODAS!
Las mentiras de Rajoy
Valentina Vera.¿Cómo podemos confiar en Rajoy si miente?,¿Cuántas veces hemos escuchado que Rajoy no subiría los impuestos, no haría recortes sociales, no congelaría sueldos…..?
¿Por qué los políticos mienten de tan descarada manera? ¿No se dan cuenta de qué todo está grabado, que son personajes públicos, que estamos pendiente de ellos?
Lo primero que hace cuando llega a la Moncloa: empezar a subir impuestos, empezar a congelar lo salarios de funcionarios (encima de que les sube las horas de trabajo). Además de que no creará ningún puesto de trabajo público salvo (y menos mal) en Sanidad, Seguridad y Docencia.
¿Cómo quiere que las familias españolas se recuperen? Les sube el IRPF a todos los contribuyentes, sube el IBI al 50% de las viviendas…..
Por otra parte, los jóvenes son parte de la población más perjudicada. Más de la mitad de ellos se encuentren en paro y sin futuras expectativas de encontrar trabajo. Las ayudas del alquiler se recortan para ellos, lo que conlleva que la emancipación en estos tiempos que corren sea una cosa de locos. A esto, hay que sumarle que muchos de los que han perdido el empleo además de ser desahuciados ellos han sido desahuciados sus padres o amigos por ser sus avales bancarios. Y esto es en grande parte culpa del Gobierno que no supe imponer medidas ante la concesión de tantos préstamos, sin saber si luego podrían responder.. Dejaron al libre albedrío a los Bancos y ahora miren como estamos.
¿ Nos quedaremos sin profesionales? Muchos de los jóvenes que no encuentran empleo se están planteando salir a buscar trabajo fuera del país. La mayoría de estos chicos y chicas están profesionalmente muy bien formados y se está produciendo lo que los especialistas llaman “fuga de cerebros” , por cierto, no tiene nada que ver con la comedia española es una triste realidad. Es más este año en España han sido más los emigrantes que los inmigrantes.
Este año se vaticina aún más triste para los extranjeros ya que Rajoy en sus primeras comparecencias ha “restringido” de alguna manera la regularización de su situación, es decir, que se van a conceder muy pocas tarjetas de residencia y empleo. En mi humilde opinión, esto es un gran error ya que la mayoría de la economía sumergida está en manos de la inmigración, sino tienen papeles no cotizan en la seguridad social, no pagan impuestos, por lo tanto no ayudan a el crecimiento de la economía. Otro de los sectores que se ha visto “perjudicado” por los recortes de Rajoy han sido los sindicatos y patronales dónde el Ejecutivo ha reducido un 20% de los presupuestos.
Bueno y la aprobación de la “ley Sinde”, dentro de aproximadamente dos meses esto será toda una realidad.
Yo no soy quién para juzgar las medidas tomadas por el Gobierno, pero creo que subiendo los impuestos lo único que consigue es que se consuma menos, que sea más difícil llegar a fin de mes para muchas familias españolas…. Y aunque el esté en su “casita” comiendo un solomillo hay muchas familias que no pueden dar de comer a sus hijos y se ven obligados a acudir a la caridad de amigos y familiares.
No puede pensar en generar más flujo de capital si sube los impuestos. Los que ahora pueden crear empleo son las PYMES y los autónomos, pero si tienen que pagar más impuestos dudo mucho que tengan la capacidad de contratar a personal.
Lo que podría hacer es poner inspectores que se encarguen de vigilar la economía sumergida, si se sancionase a todo aquel que contrata y es contratado sin ningún documento que lo verifique creo que se podrían recaudar muchos fondos.
Por Isabel López Paredes
Primeros días de enero, la gente pierde el control del bolso, la tarjeta y los cheques. No son dueños de sus manos que desaforadamente entran y salen del monedero. ¿Estamos locos o somos producto de esa vida consumista que el Estado del Bienestar ha traído consigo? Sigo sin entender muchas de las atrocidades que está cometiendo la sociedad, no solo española ¡ojo al dato!, sino mundial.
Solo el hecho de ver escrito en rojo y blanco rebajas nos estimula una parte del cerebro que incita al ser humano a comprar sin tener esa necesidad, solo estar más barato, a este tipo de atrocidades me refiero. Pero muchas veces ese instinto de consumir es manipulado por la “falsa rebaja”. No me refiero a otra que a los saldos que ponen en lugar de la ropa que debería estar rebajada. Esos saldos son productos en mal estado y por los que el consumidor no debería pagar ni un solo euro.
No contentos con este engaño, hay empresarios que ponen en ese cartel coloreado de rojo y blanco liquidación. Los dueños de esta tienda saben perfectamente que el negocio no está acabado, que sus puestos de trabajo seguirán en pie y que posiblemente en verano cambiaran ese cartel por el de rebajas de verano. ¿Cual es la Moraleja del porqué ponen el cartelito principal? Fácilmente se puede responder, que los dueños de esas tiendas quieren llamar la atención para vender más y poder aumentar su beneficio. ¿A costa de qué? De la ignorancia de la gente que compra sin saber que están siendo utilizados.
Quiero sacar tarjeta roja a esos malos empresarios que pretenden sacar beneficio a costa de trampas y de etiquetas falaces. Por eso expongo el engaño al que se ven sometidos día a día los consumidores.
Deberíamos de avivarnos un poco y hacer caso a lo que la Oficina Municipal de Información al Consumidor (OMIC) expone todos los años. La OMIC dice que en estas fechas es mejor ir sin prisas y a lo loco. El ciudadano tiene derechos, y tales los puede exigir. Por eso recomienda un consumo responsable en este periodo “rebajoso”.
Con lo bonito que es ir al armario de tus abuelos y buscar entre la oscuridad trapillos “vintage”. Esas si que son verdaderas rebajas y no las del Corte Inglés. Modelitos originales los que se ponían en los años 50. Y ya que estamos en época de crisis y tenemos que apretarnos el cinturón podíamos dejarnos de locuras transitorias, como son las rebajas, y conformarnos con productos antiguos que vuelven a ponerse de moda.
Opinión/ Pablo Casal Polo
Soy el arma letal para la práctica de la corrupción, la mentira más estudiada para alcanzar consenso en una unión, que más que cohesionar, pone sobre la mesa las cartas peor repartidas de un juego de poker.
He dibujado Ases en territorios privilegiados y he dejado sin baza a la ignorancia y la dominación.
Pensé que sería difícil, pero rápidamente convencí, con un marketing exquisito, al poder…… para que me dejara caminar en un comercio injusto, en el que pocos ganan y la mayoría pierde.
Acabé con largos años de economía, antepuse lo macro a lo micro, para dejar sin sustancia a las familias, porque yo me preocupo de las cajas fuertes y soy la llave maestra de cada una de las casas de Europa.
En España fui el medio perfecto para atravesar un bigote de vello fuerte y cicatriz escondida, que tras diez años sale a la luz, y abre más que nunca la herida, una brecha que hace brotar la sangre de una economía en la que el salario no varía, pero los precios se incrementan.
Ese bigote, que se amarra fuertemente a la cara más dura que ha pasado por la presidencia del gobierno español, no perdió un sólo pelo, no sudó ni la mitad de las gotas que habéis sudado vosotros, con facturas impagadas sobre la mesa.
No saboreó una sola lágrima de las derramadas por un pueblo que no podía mantener a sus familias, porque el oro es el mismo, pero yo valgo más. Soy terrorismo monetario, de belleza superficial y unión de lazos desatados.
Mi prepotencia os ha llevado a un mercado cerrado, en el que sólo entran aquellos cuyas cuentas corrientes rozan el cielo.
Soy el Euro, y aunque no os hayáis dado cuenta, llevo diez años dibujando con fuego el infierno de vuestras vidas.
Reportaje
Por Isabel López Paredes/MADRID
Suena una guitarra, la melodía empieza a causar efecto en el público. Pero, a pesar de esto, hoy es un día gris, un día en el que la lluvia deja que la tristeza y melancolía se adueñen del edificio de Laguna.
Como cada viernes, un grupo de jóvenes preparan la actividad de la tarde con ilusión y recelo, “espero que les gusten nuestras canciones” dice Rocío (coordinadora del grupo de voluntariado). Aunque la verdadera intención de este grupo de música es otra que la de darse a conocer.
Este edificio no es un edificio cualquiera y el público de esta tarde será muy peculiar. Alejados de los típicos conciertos masificados, ruidosos y potentes, llenos de jóvenes locos que quieren comerse el mundo o que el mundo se los coma a ellos, el grupo Terciopelo actuará para los residentes del Centro de cuidados paliativos de Laguna.
Mujeres y hombres, todos ellos ancianos y enfermos, acompañados en todo momento por algún familiar agradecen a las “cantantes” la invitación para la actuación que darán en la última habitación de la primera planta. “Siento no poder acompañaros, no me encuentro con mucho ánimo, gracias por la invitación”, dice Paco F. (habitación 010). Isabel F., hermana de Paco, no para de reír y de bromear con las jóvenes, y con un gesto de complicidad asegura a las artistas que a las 6 en punto estarían en primera fila.
Mientras que algunas de las jóvenes ensayan canciones con las que debutarán esa tarde, Marina (estudiante de magisterio), Paula (estudiante de medicina) y María (estudiante de periodismo) siguen recorriendo las habitaciones de toda la planta primera, excepto la habitación 001 y la habitación 002, porque según Laura Muñoz, enfermera de planta, esos enfermos están en la fase final, no se pueden levantar de la cama.
El centro de Laguna marca objetivos alcanzables con el paciente, no en la curación sino el bienestar. Este edificio, construido en la Comunidad de Madrid en 2002, procura cuidar al enfermo y a su familia en todas las esferas posibles (físicas, psico-emocional y sociales), adjunta una de las trabajadoras del centro.
El público de Terciopelo espera impaciente el comienzo de la actuación y es que para ellos un minuto de vida es importante. Viven sabiendo que su final se acerca, y sí, parece cruel hablar de esta forma, pero ellos mismos lo reconocen. Saben que están más o menos a 15 días del momento final. Por eso, las componentes de Terciopelo quieren que le salga bien, quieren intentar borrar de la mente de los enfermos, por un momento, la palabra “muerte”.
“Cuando tiene una enfermedad crónica y progresiva, se podría decir que un enfermo es también en cierto sentido una familia enferma”, opina el Dr. Noguera, subdirector médico del centro. Por eso, este grupo de voluntarias dedican unas horas a la semana a estas familias. Con su apoyo intentan mejorar el ánimo tanto del paciente como del familiar que se encuentre con él. Este tipo de tratamiento afirma la vida y considera la muerte como un proceso normal: ni la acelera ni la retrasa, sino que asegura la calidad de vida hasta su final.
Casi son las 6 de la tarde y la sala, en la que actuará Terciopelo, está abarrotada. Sillas de ruedas que entran y salen, batas de hospital, personas con ansias de vivir, miradas de complicidad y ambiente festivo es la visual que se encuentran las jóvenes al entrar en la sala. Y ahora sí, empieza la función.
Suena la música y todas se ponen a cantar e incluso a bailar. Con ilusión y empeño intentan conseguir sacar al menos una sonrisa de esas personas que se encuentran en su fase final. Y ¡claro que lo consiguen!… En el fondo de la sala está un hombre, en silla de ruedas, con las piernas cubiertas con una manta de cuadros rojos y negros, el gesto de su cara refleja ternura y satisfacción. Cerca de la ventana animada está Rosa Pérez, padece Alzheimer y ya no recuerda que había sido secretaria del embajador de España en Londres y tampoco recuerda que hablaba cinco idiomas, pero si recuerda que para animar una actuación, por pequeña e insignificante que sea, solo hacen falta palmas, ganas de pasarlo bien y sonreír.
Todos parecen estar contentos con este grupo de música, pero ellos no saben que este grupo se ha formado improvisadamente, que el nombre del grupo (Terciopelo) lo puso la chica de administración al crear los carteles de anuncio de la actuación que se expusieron en el Centro, que ninguna de las chicas se conocían, que muchas de ellas no sabían cantar bien y otras tantas no conocían las canciones que ellos que les pedían… Pero aún así, todas juntas quisieron hacer esa labor y llenar de alegría un día en la vida de estas personas.
Con el sonido de las maracas, las palmas y la guitarra se consiguió, en ese viernes triste y gris, dejar pasar un rallito de sol y un momento de felicidad para todos los enfermos paliativos de Laguna, gracias a las caricias y sonrisas que Terciopelo les dedicó.
Fuente:
cpscomplutense
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